Infraestructura F7

Inicio » Infraestructura F7

1. Plan de Tratamiento de residuos sólidos del sector salud (biocontaminados)

En los centros de atención médica de Perú, se genera anualmente alrededor de 20,000 toneladas de desechos biocontaminados, con una distribución del 75% en Lima y el restante 25% en provincias. Sin embargo, a pesar de la magnitud de esta generación de residuos, la capacidad de tratamiento en el país se ve restringida por 12 plantas de tratamiento en todo el Perú, de las cuales solo 5 se encuentran en Lima operativas y fase de proyecto. Actualmente, las únicas alternativas disponibles para el tratamiento de estos desechos son la incineración y la autoclave. Ante este panorama, Azul Sostenible se propone introducir una nueva planta de tratamiento de residuos biocontaminados en Perú, incorporando la innovadora tecnología emergente de ozono. Esta iniciativa busca no solo minimizar el impacto ambiental, sino también establecer un estándar moderno en el manejo de residuos biocontaminados en el país. Para llevar a cabo este proyecto, Azul Sostenible busca un partner internacional interesado en colaborar y participar en la modernización de las prácticas de tratamiento de residuos biocontaminados en el país.

2. Planta de Valorización Energética

En el contexto peruano, la generación anual de residuos sólidos municipales alcanza aproximadamente las 8,455,615 toneladas, equivalente a una carga diaria de 23,166 toneladas. Del total diario, el 61.75% se dirige hacia disposición final. Para optimizar el manejo de estos desechos, las plantas de valorización energética de residuos sólidos municipales se presentan como una alternativa, utilizando dichos residuos como materia prima para la generación de energía. Dentro de sus perspectivas, Azul Sostenible tiene como proyecto la construcción de plantas de valorización energética de residuos sólidos municipales en el Perú. La implementación de este proyecto requerirá la colaboración de un partner internacional interesado en gestionar conjuntamente esta iniciativa en el país.

3. Planta de valorización de Residuos Sólidos de la Construcción y Demolición y Escombrera

En el ámbito de la gestión de residuos de construcción y demolición en el Perú, se observa una carencia significativa, siendo solo una empresa la encargada de la valorización de estos desechos, sin presencia de escombreras especializadas. Ante esta brecha y considerando el notable volumen de residuos generados en el país, Azul Sostenible se propone como pionera en la construcción de una planta de valorización. Este proyecto técnico y sostenible busca no solo cubrir esta necesidad insatisfecha en la gestión de residuos, sino también contribuir activamente a la promoción de prácticas más responsables y sostenibles en el sector de construcción y demolición en el Perú.

4. Relleno de Seguridad

En el panorama de gestión de residuos peligrosos en el Perú, la discrepancia entre la considerable generación anual de desechos peligrosos, provenientes de empresas mineras e industrias químicas, y la disponibilidad limitada de centros de rellenos de seguridad, destaca como un desafío crítico. Con tan solo seis instalaciones especializadas en el país, estando una de ellas ubicada en Lima, surge la necesidad imperante de abordar esta brecha. Ante esta coyuntura, Azul Sostenible se posiciona como un agente catalizador al proyectarse la creación de un relleno de seguridad adicional, para lo cual, considera importante un partner internacional, que sea un actor clave en el desarrollo de esta infraestructura de disposición final, no solo para gestionar eficazmente los residuos peligrosos, sino también para contribuir activamente al desarrollo sostenible del país.

5. Planta de valorización de RAEE

En el año 2021, el Perú generó aproximadamente 217,000 toneladas métricas de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE) y al contar solo con 7 operadores de RAEE en el país se ha evidenciado una marcada insuficiencia en el manejo y la infraestructura de estos desechos. Ante esta carencia, Azul Sostenible tiene como meta la implementación de una Planta de Valorización de RAEE, con el objetivo de mejorar la gestión ambiental y fomentar la economía circular, para lo cual considera pertinente la inclusión de un partner internacional que desee trabajar en conjunto para alcanzar este objetivo.

6. Planta de valorización de NFU

Cada año, en el Perú ingresa una gran cantidad de neumáticos que después se convierten en residuos. En el año 2014 ingresaron 55,673 toneladas de llantas y tan solo en 2018 se incrementó a 92,659 toneladas. Esta cantidad de neumáticos que ingresan al Perú y que eventualmente se convierten en residuos, comparado con escasas plantas de valorización y las 10 plantas de acondicionamiento de NFU que existen actualmente es preocupante, debido a que estas no abastecen la cantidad de residuos de NFU. Realizar una buena gestión y manejo de estos residuos en el Perú se han convertido en prioridad, es por este motivo que Azul Sostenible, tiene la iniciativa de implementar una planta de valorización de NFU, para lo cual considera importante realizarlo en conjunto con un partner internacional, con el cual pueda desarrollar una planta de valorización de NFU que permita el desarrollo sostenible en el país.

7. Planta de industrialización de Residuos Sólidos T.E.

El Perú se enfrenta a un desafío significativo en la gestión de residuos sólidos, con una producción anual aproximada de 8 toneladas de residuos, de las cuales el 61% se destina a la disposición final. La falta de infraestructuras para la industrialización de residuos perpetúa este proceso, desaprovechando la oportunidad de utilizar estos desechos como materias primas en la fabricación de nuevos productos. La transformación de residuos en artículos comercializables se posiciona como un imperativo estratégico crucial para fomentar el desarrollo sostenible del país.

En este contexto, Azul Sostenible se propone establecer una planta de industrialización de residuos sólidos, incorporando tecnologías emergentes que revolucionen el proceso de transformación con miras a mejorar la eficiencia, la eficacia y, fundamentalmente, reducir el impacto ambiental. Reconociendo la complejidad del desafío, la empresa considera fundamental la formación de alianzas estratégicas con socios internacionales, actores clave dispuestos a colaborar en sinergia para alcanzar este objetivo y así contribuir de manera significativa al desarrollo sostenible del país.